El pergamino que sobrevivió al infierno: así la IA resucitó un texto milenario… y Elon Musk lo vio
Una combinación de inteligencia artificial, rayos X y ambición empresarial abre una nueva era para descifrar el pasado
La noche del año 79 d.C., el Vesubio sepultó Herculano bajo cenizas y lava. Entre sus ruinas, un pergamino carbonizado aguardaba, intacto pero ilegible, durante dos milenios. Hoy, gracias a un proyecto que mezcla tecnología de vanguardia y pasión por la historia, sus secretos empiezan a revelarse. Y hay un nombre inesperado detrás de este renacimiento: Elon Musk.
El milagro tecnológico que nadie vio venir
El pergamino, parte de una colección rescatada en el siglo XVIII, era demasiado frágil para abrirlo. «Pensábamos que jamás leeríamos su contenido», admite Brent Seales, informático de la Universidad de Kentucky y líder del Vesuvius Challenge, un proyecto lanzado en 2023 para resolver el enigma. La clave estuvo en un sincrotrón, un acelerador de partículas que emite rayos X tan potentes que escanean capas de material carbonizado sin dañarlas. Luego, algoritmos de IA analizaron las imágenes 3D y detectaron trazos de tinta invisible al ojo humano.
El primer hallazgo fue una palabra griega: «πορφύραc» (disgusto), repetida en varias columnas. «Es como escuchar voces del pasado después de siglos de silencio», describe Richard Ovenden, bibliotecario de la Universidad de Oxford, donde se guardan otros rollos similares.
Musk: de cohetes a pergaminos
Mientras los arqueólogos celebraban el avance, un giro sorprendente llegó desde Silicon Valley. Elon Musk, el magnate detrás de Tesla y SpaceX, anunció su interés en financiar tecnologías para acelerar estos estudios. Aunque no ha detallado su plan, fuentes cercanas al proyecto sugieren que su aporte podría mejorar la IA usada para decodificar textos. «Es un campo donde la innovación necesita recursos ilimitados. Musk los tiene», comenta un investigador anónimo.
La noticia genera tanto esperanza como escepticismo. Algunos expertos, como Seales, recalcan que el camino es largo: «Aún debemos refinar el software para leer rollos completos». Otros temen que la llegada de figuras como Musk comercialice una labor históricamente académica.
¿Por qué importa esto?
Los pergaminos de Herculano son únicos: contienen filosofía, poesía y ciencia de una biblioteca romana preservada por una tragedia. Descifrarlos podría reescribir capítulos de la historia antigua. «Es como encontrar una cápsula del tiempo», dice Ovenden.
Con Musk en escena, el proyecto gasta visibilidad y recursos, pero también plantea preguntas: ¿Puede un empresario impulsar la arqueología sin alterar su esencia? ¿Qué pasará cuando la IA no solo lea, sino interprete textos perdidos?
El futuro ya está aquí
Mientras tanto, en laboratorios de Oxford y Kentucky, las máquinas siguen trabajando. Cada letra recuperada es un triunfo contra el tiempo. Y aunque el pergamino aún guarda misterios, su historia ya cambió: de ser una reliquia muda a convertirse en un símbolo de cómo la tecnología puede tender puentes entre eras.