En el bullicio del Museo Santiago Rey Fernández-Latorre, uno no podía evitar sentir la energía de la innovación en el aire. La jornada organizada por La Voz de Galicia y Vocento, con la colaboración de Telefónica, fue un viaje a través de los grandes retos que enfrenta nuestra sociedad. Y, claro, no podía faltar la inteligencia artificial en la conversación.

La IA está en un momento dulce, como un buen vino gallego. Pero, como todo en esta vida, hay que saber disfrutarlo con moderación y responsabilidad. Los expertos en el foro hicieron hincapié en la ética y la sostenibilidad. Porque esta tecnología, poderosa como es, consume recursos. Y no podemos olvidarnos del planeta.

Lo curioso es que mientras las grandes empresas ya están subidas al tren de la IA, los pequeños negocios aún están en la estación, dudando si subirse o no. Es un dilema, porque el que no se suba ahora, corre el riesgo de quedarse atrás. Pero no se trata solo de seguir una moda. Se trata de ser competitivos y de saber usar la tecnología para mejorar la vida de las personas.

Y, cómo no, la ciberseguridad también tuvo su protagonismo. En estos tiempos, protegerse de los ataques es tan importante como innovar. Los expertos lo dejaron claro: la IA puede ser una herramienta para la defensa, no solo para el ataque. Así que, ya lo ves, el camino hacia el futuro está lleno de desafíos, pero también de oportunidades.