El cibercrimen se vuelve autónomo

El cibercrimen se vuelve autónomo

A ver, que esto ya no es ciencia ficción. Que no estamos hablando de Terminators ni de Skynet, sino de un mundo donde los ciberdelincuentes ya no necesitan estar pegados al ordenador para hacer de las suyas. Imagina un ordenador que puede orquestar un ataque cibernético con la misma facilidad con la que tú pides una pizza online. Y lo hace solo, sin supervisión humana. Eso es lo que está pasando con la inteligencia artificial y el cibercrimen.

Check Point Software, una de esas compañías que se encargan de proteger nuestros datos de los malos, ha lanzado un aviso: uno de cada 54 prompts de IA generativa que se hacen desde empresas puede ser un agujero negro para la seguridad. ¿Te imaginas el nivel de paranoia que esto puede generar en las oficinas? Por no hablar de que el 91% de las organizaciones están jugando con fuego al usar estas herramientas sin un control adecuado.

El futuro del cibercrimen, según ellos, viene con cuatro amenazas que suenan a película de espías: ciberataques autónomos, malware adaptativo, amenazas internas sintéticas y el envenenamiento de modelos. Las máquinas aprenden de sus errores, y eso es tanto una bendición como una maldición. Eusebio Nieva, el gurú de Check Point en España y Portugal, lo dice claro: la única manera de pelear contra esto es usando más inteligencia artificial. Fuego contra fuego.

Así que, si estás en una empresa, igual es hora de pensar en cómo protegerte antes de que sea demasiado tarde. No esperes a que el cibercrimen autónomo toque a tu puerta. Porque cuando lo haga, no será para pedir azúcar.