La vida de un recién graduado ya no es lo que era. La inteligencia artificial está aquí, y no se anda con rodeos. Un artículo en The Guardian pinta un panorama bastante sombrío: las vacantes de nivel inicial están desapareciendo más rápido de lo que puedes decir “automatización”. Pero, ¿es realmente así de malo?
Hablemos claro: la economía se está complicando, hay un exceso de graduados y la IA está erosionando ciertos empleos. Pero no todo es pesimismo. Algunas voces, como la del CEO de Anthropic, dicen que la mitad de los trabajos de entrada podrían esfumarse en cinco años. Sin embargo, por otro lado, se necesitan nuevas habilidades humanas como el pensamiento crítico y la ética. Entonces, ¿qué hacer?
A lo largo de mis años formando directivos, he visto cambios radicales. Y, sin duda, estamos en uno de esos momentos. Para los graduados, el consejo es claro: no basta con el diploma. Se necesita una formación continua, habilidades críticas y, sobre todo, una actitud resiliente.
Las PYMEs, sorprendentemente, se presentan como un refugio. Buscan graduados que apliquen la IA en sus procesos. Y aquí hay una puerta abierta para aquellos que saben aprovecharla.
Mis estudiantes tienen una ventaja: están educados en un entorno que no ha limitado su acceso a la IA. Saben usarla con criterio y, lo más importante, están conectados y motivados. Tal vez, solo tal vez, no solo superen esta crisis, sino que sean ellos quienes diseñen el futuro. Y eso, amigos, es algo que vale la pena observar.

