La revolución digital ha alcanzado a los departamentos legales, o al menos eso parece. Un 44% de estos departamentos ya utiliza inteligencia artificial generativa, un aumento notable respecto al año pasado. Pero, detengámonos un momento, ¿qué significa esto realmente? ¿Estamos ante una transformación genuina o simplemente siguiendo la corriente tecnológica?
El estudio ‘The General Counsel Report 2025’ nos da algunas pistas. La IA se está usando para tareas como la investigación legal y el análisis contractual, pero, ojo, siempre bajo la atenta mirada de un humano. Parece que aún no estamos listos para soltar las riendas por completo.
Lo que sorprende es que, aunque la adopción de la IA está en aumento, el 75% de los departamentos aún carece de una hoja de ruta tecnológica clara. ¿Cómo es posible? Tal vez sea el reflejo de una industria que, aunque avanza, lo hace con cautela.
Sin un responsable de operaciones, la presión sobre estos departamentos aumenta. La carga de trabajo se multiplica y las expectativas crecen. Algunos han optado por externalizar más trabajo, aumentando sus presupuestos. Pero, ¿es esta la solución?
La automatización ya está presente, especialmente en tareas repetitivas. Sin embargo, la reticencia sigue ahí. ¿Será miedo al cambio o simple prudencia?
Lo cierto es que, aunque los departamentos legales están en camino hacia la digitalización, aún enfrentan retos significativos. La tecnología, si se usa adecuadamente, podría convertirse en una ventaja competitiva. Pero sin una planificación adecuada, el riesgo es que se convierta en otro dolor de cabeza más.
Javier García-Chappell de FTI Consulting lo resume bien: el aumento del riesgo y la demanda seguirán definiendo cómo los departamentos legales adoptan la tecnología. El tiempo dirá si estamos ante un cambio estructural o simplemente una moda pasajera.