En el corazón del Silicon Valley, Meta, el gigante de las redes sociales, está trazando un nuevo capítulo en su historia de innovación. La compañía, liderada por Mark Zuckerberg, está en el umbral de una inversión histórica en la startup de inteligencia artificial Scale AI. Fuentes cercanas a la operación, citadas por Bloomberg, sugieren que esta inyección de capital podría superar los 10.000 millones de dólares, convirtiéndose en una de las mayores financiaciones privadas jamás vistas.
Scale AI, un actor emergente en el mundo de la inteligencia artificial generativa, ya cuenta con clientes de peso como Microsoft y OpenAI. Su especialidad radica en proporcionar servicios de datos cruciales para el entrenamiento de modelos de aprendizaje automático. La startup ha sido un beneficiario prominente del auge de la IA, y su valoración alcanzó los 14.000 millones de dólares en 2024. Uno de los hitos recientes de Scale fue estar en conversaciones para una oferta pública de adquisición que potencialmente elevaría su valor a 25.000 millones de dólares.
Para Meta, esta inversión marca un cambio de estrategia. Hasta ahora, la compañía ha dependido principalmente de su investigación interna para avanzar en inteligencia artificial. Sin embargo, al mirar hacia fuera y considerar una inversión de esta magnitud en Scale AI, Meta sigue los pasos de titanes como Microsoft, Amazon y Alphabet, que ya han realizado significativas inversiones en empresas especializadas en IA a través de créditos para potencia informática.
Este movimiento estratégico tiene lugar en un contexto donde Zuckerberg ha declarado la inteligencia artificial como la prioridad máxima para Meta. La compañía está comprometida a gastar hasta 65.000 millones de dólares en proyectos de IA este año, con el objetivo de convertir su modelo de lenguaje, LLaMA, en un estándar mundial. Este modelo de chatbot, integrado en plataformas como Facebook, Instagram y WhatsApp, ya es utilizado por mil millones de personas cada mes.
La colaboración entre Meta y Scale AI no es nueva. Ambas comparten un interés en la tecnología aplicada a la defensa. Recientemente, Meta anunció una asociación con Anduril Industries para desarrollar productos para el ejército estadounidense. Dentro de esta alianza, Meta ha autorizado el uso de sus modelos de inteligencia artificial por parte de agencias gubernamentales y contratistas de defensa, y está trabajando con Scale en un programa llamado Defense Llama, que adapta su modelo LLaMA para usos militares.
Mientras tanto, Scale ha ampliado su colaboración con el gobierno de Estados Unidos, firmando contratos con el Departamento de Defensa. Esta sinergia entre Meta y Scale subraya una tendencia creciente en el sector tecnológico: la convergencia de la innovación en inteligencia artificial con aplicaciones en defensa y seguridad nacional.
Con las negociaciones aún en curso, los términos finales de la inversión de Meta en Scale AI podrían cambiar. No obstante, este movimiento refleja la ambición de Meta de no solo participar, sino liderar la evolución del ecosistema de inteligencia artificial. El resultado podría definir no solo el futuro de ambas empresas, sino también el rumbo de la innovación tecnológica en la próxima década.