La OTAN se alía con la IA de Palantir para modernizar su estrategia militar

La OTAN se alía con la IA de Palantir para modernizar su estrategia militar

No se trata solo de fuerza militar. El nuevo campo de batalla se libra con datos, algoritmos y decisiones tomadas en milisegundos. Por eso, la OTAN ha apostado por incorporar inteligencia artificial de última generación a su estructura operativa. Y lo ha hecho con una herramienta polémica: Palantir.

Esta tecnología estadounidense, propiedad del multimillonario Peter Thiel (conocido por su cercanía a Donald Trump), ha sido elegida por la Agencia de Comunicaciones e Información de la OTAN (NCIA) para modernizar sus capacidades en la era digital. Se espera que esté completamente operativa en solo 30 días.

El objetivo es claro: acelerar la toma de decisiones en situaciones críticas, mejorar la planificación del terreno y fusionar datos de inteligencia en tiempo real. La inteligencia artificial ya no es ciencia ficción. Es táctica militar.

Palantir se aliará directamente con el Cuartel General Supremo de las Potencias Aliadas en Europa (SHAPE), ofreciendo soluciones basadas en modelos generativos, aprendizaje automático y análisis predictivo. Según Ludwig Decamps, gerente general de la NCIA, se trata de una forma de “empoderar a nuestras fuerzas en el campo de batalla moderno”.

Pero la decisión no ha estado exenta de controversia. La adquisición llega en un momento en que la Alianza Atlántica vive tensiones internas, con amenazas explícitas por parte de Trump de abandonar la OTAN. La implicación de Thiel, un aliado cercano del exmandatario, no ha pasado desapercibida.

Sin embargo, desde Palantir defienden la neutralidad técnica de su herramienta. Shon Manasco, consejero senior de la compañía, lo resume así: “Esta colaboración demuestra el compromiso de la OTAN con liderar la innovación tecnológica con valentía”.

En la guerra del siglo XXI, los algoritmos pueden ser tan decisivos como las botas sobre el terreno. Y la OTAN acaba de elegir los suyos.