La IA y su incapacidad para leer la hora

La IA y su incapacidad para leer la hora

Imagina que tienes un reloj y le pides a tu asistente de inteligencia artificial que te diga qué hora es. Lo lógico sería esperar una respuesta inmediata, ¿verdad? Pues resulta que no es tan sencillo. Un grupo de investigadores españoles puso a prueba a varios chatbots de IA con relojes analógicos, y los resultados fueron, digamos, desastrosos. Los modelos de IA no solo fallaron en leer las horas correctamente, sino que lo hicieron de manera tan consistente que uno empieza a cuestionar toda la narrativa de la «inteligencia» artificial.

La prueba, realizada por universidades en Madrid, Valladolid y Milán, consistió en mostrarle a la IA un conjunto de imágenes de relojes. Y claro, la IA se quedó en blanco. Al principio pensé, «bueno, todos tenemos un mal día», pero incluso después de realizar ajustes finos, los modelos seguían tropezando en terreno desconocido. ¿Qué nos dice esto sobre la capacidad de estos sistemas para generalizar y razonar? Pues la verdad, no mucho.

La ironía es que mientras los humanos podemos leer la hora incluso en relojes distorsionados al estilo Dalí, estos modelos de IA simplemente no pueden. Y esto plantea un problema serio: si fallan en tareas que parecen tan simples, ¿cómo podemos confiar en ellos para analizar imágenes médicas o tomar decisiones críticas en tiempo real?

Es frustrante, pero también un recordatorio de que, a pesar de todo el bombo, la IA sigue siendo en muchos aspectos «tontísima», como dirían algunos expertos. Y mientras no pueda superar estas limitaciones, siempre habrá un grado de escepticismo sobre su verdadera utilidad.