En Salamanca, una ciudad que evoca historia y tradición, se está gestando una revolución moderna. La Fundación I+E reunió a gigantes como Deloitte, IBM, HP y Pfizer para mostrar el impacto de la inteligencia artificial en la transformación empresarial. Y, vaya, lo que tienen entre manos es impresionante.
Juan Manuel Corchado, rector de la Universidad de Salamanca, expresaba con orgullo el papel que la institución juega en este cambio de paradigma. No solo se trata de conocimiento, sino de construir una comunidad que atraiga talento y mejore vidas. Porque, al final del día, ¿qué es la innovación si no toca lo humano?
Las empresas presentaron casos de éxito que parecen sacados de un episodio de Black Mirror, pero son muy reales. Desde optimizar procesos industriales hasta transformar la investigación médica, la IA se perfila como el motor que nos llevará al futuro. Y Salamanca, con su universidad y sus alianzas público-privadas, está decidida a ser un referente.
El compromiso de estas multinacionales no es solo con la innovación, sino con España. La Fundación I+E lo tiene claro: quieren que nuestro país se convierta en un imán de inversión y desarrollo. ¿Estamos listos para ello? La respuesta está en el aire, pero si algo es seguro, es que el camino hacia adelante es tecnológico y, por qué no decirlo, emocionante.

