Inteligencia artificial desvela la trampa de las revistas científicas depredadoras

Inteligencia artificial desvela la trampa de las revistas científicas depredadoras

A veces siento que el mundo de la ciencia es como un campo de batalla, y ya sabes, en toda guerra moderna siempre hay un aliado inesperado. Esta vez, el héroe inesperado es una inteligencia artificial que ha puesto en jaque a más de 1.400 revistas científicas «depredadoras». ¡Sí, las mismas que intentan hacer negocio a costa de la academia!

La historia comienza en la Universidad de Colorado en Boulder, donde un equipo de investigadores, liderado por el audaz Daniel Acuña, decidió que era hora de hacer algo contra estas publicaciones que cobran por publicar sin revisar adecuadamente los estudios. Imagina estar en un país como China, India o Irán, y que te pidan pagar por ver tu trabajo en una revista que ni siquiera se molesta en revisarlo. Es como si comprases una entrada de cine y la película ni siquiera tuviera sonido.

Lo curioso es que, a pesar de que el Directorio de Revistas de Acceso Abierto lleva años marcando publicaciones sospechosas, el ritmo de aparición de estas revistas es tan frenético que parece que estamos en un juego de whack-a-mole. Pero ahora, con una IA que evalúa criterios como la calidad gramatical de sus sitios web y la existencia de un consejo editorial real, los tiempos están cambiando.

El trabajo no es perfecto, claro está. De las 1.400 revistas marcadas por la IA, finalmente se confirmó que más de 1.000 eran realmente problemáticas después de la revisión humana. Esto nos recuerda que, por mucho que dependamos de la tecnología, al final del día, la intuición humana sigue siendo crucial.

Y Acuña lo deja claro: “En ciencia, no se empieza desde cero. Se construye sobre la base de la investigación de otros. Si los cimientos de esa torre se derrumban, todo se derrumba”. Y tiene razón. Porque la ciencia, como ese castillo de naipes que intentas construir en una tarde lluviosa, necesita cada carta en su lugar correcto, o todo se viene abajo.