Yuval Noah Harari es uno de esos pensadores que te hacen detenerte y reconsiderar todo lo que creías saber. En su libro «Nexus», Harari plantea una idea que a mí me dejó pensando: estamos jugando con fuego, invocando fuerzas que podrían superarnos. Y no, no se refiere a un nuevo villano de Marvel, sino a la inteligencia artificial. ¿Quién iba a decir que los algoritmos podrían ser los nuevos titanes de la era moderna?

Harari nos recuerda que, a diferencia de cualquier otra tecnología, la IA tiene el potencial de tomar decisiones por su cuenta. Eso es un poco aterrador si lo piensas. Imagina un mundo donde los drones deciden a quién apuntar o donde las IAs crean nuevas bombas. No es ciencia ficción, es una posibilidad. Y lo más inquietante es que estas tecnologías podrían evolucionar más rápido de lo que podemos comprender o controlar.

Lo que me fascina de Harari es su habilidad para conectar la historia con el presente. Usando mitos como el de Faetón y cuentos como «El aprendiz de brujo», nos advierte sobre los peligros de desatar fuerzas que no podemos dominar. En su característico estilo provocador, Harari nos invita a reflexionar sobre el papel de la IA en nuestras vidas y cómo podría redefinir no solo nuestra historia, sino la evolución misma de la vida en la Tierra.

En un mundo donde incluso nuestras decisiones más personales podrían ser influenciadas por algoritmos, ¿podemos realmente confiar en que estas tecnologías nos lleven hacia un futuro mejor? Harari nos deja con más preguntas que respuestas, pero quizás esa sea la intención. Porque, al final del día, es nuestra responsabilidad decidir cómo queremos que sea el futuro. Y eso, amigos míos, es un poder que nunca deberíamos subestimar.