Inteligencia Artificial: Repensando las Reglas de Innovación en la Era Digital

Inteligencia Artificial: Repensando las Reglas de Innovación en la Era Digital

La inteligencia artificial no es solo una revolución tecnológica; está alterando profundamente las teorías clásicas de cómo se difunden las innovaciones. Durante décadas, modelos como el de Everett Rogers y el de Frank Bass han guiado nuestra comprensión de la adopción tecnológica. Sin embargo, con la aparición de herramientas como ChatGPT, estamos presenciando una aceleración sin precedentes que desafía estos marcos tradicionales.

Históricamente, la adopción de nuevas tecnologías seguía un patrón predecible. Rogers, por ejemplo, describía una curva que comenzaba con innovadores y avanzaba hacia los rezagados. Sin embargo, el caso de ChatGPT, que ha alcanzado a más de ochocientos millones de usuarios en apenas año y medio, sugiere que estas fases se están solapando. En lugar de desaparecer, las etapas de adopción se comprimen, acelerando el ciclo completo a tan solo 24–36 meses.

Varios factores han contribuido a esta explosión de adopción. Los costos marginales han disminuido drásticamente, mientras que la accesibilidad se ha simplificado al máximo. No se requiere hardware especial ni formación avanzada; cualquier persona puede utilizar un chatbot de IA generativa con solo abrir una aplicación. Además, la imitación viral, potenciada por plataformas como TikTok y YouTube, ha amplificado la difusión de manera exponencial.

En términos del modelo de Bass, la inteligencia artificial ha mostrado una tasa de adopción social (q) excepcionalmente alta. Aunque los LLMs no eran nuevos en 2022, el momento sociotecnológico fue oportuno, facilitando una adopción por imitación rápida gracias a la infraestructura digital existente y la cultura de «techfluencers».

Este fenómeno plantea la pregunta: ¿estamos ante una nueva clase de innovación? Revisar el modelo de Rogers desde una perspectiva contemporánea revela una «adopción simultánea», donde innovadores y rezagados comienzan a usar la tecnología casi al mismo tiempo. Las herramientas basadas en IA se adaptan y aprenden del usuario, creando una experiencia personalizada que acelera aún más la curva de adopción.

Para los expertos en innovación, la inteligencia artificial ofrece lecciones valiosas. La velocidad de adopción no elimina la estructura subyacente, pero requiere recalibrar los modelos tradicionales. El contexto digital actual, los hábitos de consumo y las redes sociales han transformado la difusión de innovaciones de una manera nunca antes vista. Las métricas de adopción deben considerar nuevas variables como la viralidad y el aprendizaje automático integrado, redefiniendo un panorama frenético que todos debemos tener en cuenta.