Avances y Dilemas Éticos en la Reproducción Asistida con Inteligencia Artificial

Avances y Dilemas Éticos en la Reproducción Asistida con Inteligencia Artificial

La inteligencia artificial (IA) está revolucionando el campo de la reproducción asistida, ofreciendo nuevas esperanzas a quienes desean formar una familia. En España, más del 11% de los nacimientos actuales se deben a estas técnicas, reflejando un cambio en los modelos familiares y un retraso en la maternidad. Estefanía Rodríguez, líder del Servicio de Reproducción Asistida en el Hospital Quirónsalud Donostia, analiza estos avances y sus repercusiones.

Uno de los desarrollos más destacados es la aplicación de IA para seleccionar óvulos y espermatozoides con mayor precisión. Rodríguez explica cómo esta tecnología, aunque aún en fase de validación, promete mejorar los resultados sin manipular directamente los embriones. «Los modelos de IA permiten una evaluación más eficiente de la calidad de los gametos», asegura.

En el Congreso Mundial sobre Reproducción Asistida, se exploraron también futuras posibilidades, como la creación de óvulos en laboratorio a partir de células madre. Aunque este avance está en sus etapas iniciales en humanos, ya se han logrado nacimientos en ratones, mostrando un potencial prometedor.

Estos desarrollos, sin embargo, no están exentos de dilemas éticos y legales. La manipulación de la vida humana a este nivel plantea cuestiones sobre los riesgos genéticos, como enfermedades hereditarias o cáncer. «Algunos países ya están legislando sobre los posibles consentimientos y consecuencias», advierte Rodríguez.

La IA también ha ampliado las opciones reproductivas para mujeres mayores, solteras y parejas del mismo sexo. La vitrificación de óvulos es una opción cada vez más consultada por mujeres jóvenes conscientes del impacto del retraso en la maternidad.

Rodríguez aconseja a quienes consideran tratamientos de fertilidad consultar a un especialista tras seis meses de intentos, o antes si hay condiciones médicas conocidas. «Cada caso es único y debe ser valorado individualmente», concluye, ofreciendo un mensaje esperanzador sobre las altas probabilidades de éxito con las técnicas actuales.

En resumen, la integración de la inteligencia artificial en la reproducción asistida abre un nuevo capítulo lleno de posibilidades, pero también de desafíos éticos que la sociedad deberá abordar con cuidado.