El apagón que encendió la conspiranoia: extraterrestres, Putin y una IA fuera de control

El apagón que encendió la conspiranoia: extraterrestres, Putin y una IA fuera de control

Cuando la luz se apaga, la imaginación se enciende.
Este lunes, un apagón masivo dejó a oscuras a buena parte de Europa, incluida toda la Península Ibérica. Sin previo aviso, miles de hogares y negocios se vieron de repente atrapados en la parálisis: sin poder trabajar, desplazarse o, en muchos casos, ni siquiera pagar. La incertidumbre fue inmediata. Pero donde falta información, crecen los rumores.

Mientras los técnicos aún trataban de entender el origen del problema, en internet ya circulaban respuestas… o más bien teorías disparatadas. ¿La más popular? Que los extraterrestres habían decidido hacer su primera jugada contra la humanidad. Para quienes han crecido con novelas de ciencia ficción o series como El problema de los tres cuerpos, la idea de que los aliens atacaran primero nuestras infraestructuras tecnológicas resulta casi lógica. Pero no. No hay ni una sola prueba de que el fallo eléctrico haya venido de otro planeta.

Otra sospecha apuntó a Rusia. Según cientos de mensajes en redes sociales y cadenas de WhatsApp, Vladimir Putin habría lanzado un ataque dirigido a desestabilizar Europa. Teniendo en cuenta los recientes conflictos internacionales, era fácil que la teoría prendiera. Sin embargo, las autoridades internacionales han negado cualquier indicio de un sabotaje, y no hay pruebas que relacionen a Rusia con el apagón. Además, el ataque no tendría sentido en países ajenos al conflicto como España o Portugal.

Y si no son extraterrestres ni Putin, ¿quién queda? Algunos han señalado a una inteligencia artificial rebelde, fruto de un experimento fuera de control, mientras otros han acusado a Trump o a China en un curioso revival de viejas tensiones comerciales. De nuevo: ni rastro de evidencias.

Incluso un falso informe sobre ciberataques desde el norte de África se ha propagado en WhatsApp, mencionando siglas de espionaje digital que suenan sofisticadas pero no tienen respaldo oficial. El Instituto Nacional de Ciberseguridad ha confirmado que investiga posibles fallos en el sistema, pero, por ahora, todo apunta a una avería más tradicional, de las que, aunque menos emocionantes, también suceden.

Así, entre memes de ovnis y teorías de thriller tecnológico, se cuela una verdad sencilla pero crucial: en momentos de incertidumbre, la desinformación corre más rápido que la electricidad. Conviene respirar hondo, desconfiar de los mensajes alarmistas y esperar a que hablen quienes realmente saben de qué va el asunto.