Liang Wenfeng y DeepSeek: La revolución china de la inteligencia artificial que Occidente no vio venir
En 2023, una nueva estrella surgió en el firmamento de la inteligencia artificial. Su nombre: DeepSeek. Su creador, Liang Wenfeng, un ingeniero chino que, sin haber estudiado en el extranjero ni contar con el respaldo de Silicon Valley, desafió el dominio tecnológico de Estados Unidos con un modelo de IA de bajo costo y altísima eficiencia.
El impacto fue inmediato. DeepSeek irrumpió en el mercado con un presupuesto de menos de 6 millones de dólares, apenas un 4% de lo que costó desarrollar ChatGPT. Su modelo R1 fue un golpe en la mesa que hizo tambalear las inversiones de Wall Street en empresas como OpenAI y en gigantes del hardware como NVIDIA.
El nacimiento de un genio
Liang Wenfeng nació en 1985 en Zhanjiang, una ciudad portuaria de la provincia de Guangdong, China. Desde muy joven, su obsesión por la tecnología y su capacidad analítica lo llevaron a estudiar ingeniería en la Universidad de Zhejiang, una de las más prestigiosas del país. Fue ahí donde comprendió que la inteligencia artificial no era solo una tendencia, sino el futuro.
Su primer gran proyecto llegó en 2015, cuando fundó High-Flyer, un fondo de inversión basado en IA. Su modelo de análisis cuantitativo alcanzó miles de millones de dólares en activos y lo posicionó como un referente en el sector financiero. Pero, como toda historia de éxito, también tuvo su tropiezo: en 2020, el fondo perdió un tercio de su valor. Sin embargo, lejos de rendirse, Liang ya estaba cocinando su siguiente gran apuesta en las sombras.
DeepSeek: Inteligencia artificial con ADN chino
Aprovechando la infraestructura de High-Flyer, que en 2021 había acumulado 10,000 GPUs de NVIDIA, Liang comenzó el desarrollo de una inteligencia artificial que pudiera competir con los gigantes de Occidente.
En 2023, lanzó DeepSeek con el modelo V3, construido en apenas dos meses y con un enfoque innovador: código abierto y acceso API, lo que permitió que más desarrolladores pudieran integrarlo en sus proyectos. Este movimiento no solo democratizó la IA, sino que también marcó una diferencia con las estrategias más restrictivas de sus competidores.
Una amenaza para la hegemonía tecnológica de EE.UU.
El éxito de DeepSeek no pasó desapercibido. Marc Andreessen, uno de los inversores más influyentes de Silicon Valley, lo describió como «un momento Sputnik», en referencia al impacto global que tuvo el lanzamiento del primer satélite soviético en 1957.
Y con razón: la combinación de talento, eficiencia y costos reducidos encendió las alarmas en Washington. En un contexto de restricciones a la exportación de chips avanzados, DeepSeek demostró que China no necesitaba la última tecnología estadounidense para innovar en inteligencia artificial.
El futuro de Liang Wenfeng
Hoy, Liang posee el 51% de High-Flyer, lo que le da una fortuna estimada en 71 millones de dólares. Pero si DeepSeek alcanza una valoración similar a la de OpenAI (150,000 millones de dólares), su patrimonio se dispararía exponencialmente.
Sin embargo, para Liang, el dinero no es lo más importante. En una entrevista con el portal chino Waves, declaró:
«Nosotros planteamos la hipótesis de que la esencia de la inteligencia humana podría ser el lenguaje. Lo que usted considera el ‘pensamiento’ podría ser, de hecho, su cerebro tejiendo lenguaje».
Más allá de la batalla geopolítica y las restricciones comerciales, Liang Wenfeng parece tener claro su propósito: comprender la mente humana a través de la inteligencia artificial. Mientras Occidente intenta frenar su avance, él sigue adelante, cambiando el juego con una visión única y una determinación inquebrantable.