El creador del aprendizaje profundo advierte: ‘La inteligencia artificial avanza demasiado rápido

El creador del aprendizaje profundo advierte: 'La inteligencia artificial avanza demasiado rápido

¿Qué pasará cuando las máquinas sean más inteligentes que nosotros? La advertencia de Geoffrey Hinton

Un temor creciente recorre el mundo de la tecnología. Geoffrey Hinton, conocido como el ‘padrino de la inteligencia artificial’, ha lanzado una advertencia inquietante: la IA podría superar a la inteligencia humana en menos de dos décadas. Esta reflexión, cargada de preocupación, surge de la experiencia y visión de un hombre que, en 2018, recibió el prestigioso Premio Turing por su trabajo pionero en aprendizaje profundo.

Hinton comparte su visión con la BBC y admite estar sorprendido por la rapidez con la que avanza esta tecnología. «No pensé que llegaríamos tan lejos tan pronto», confiesa. Según él, la IA no solo está superando nuestras expectativas, sino que lo hace a un ritmo que dificulta su control. «Estamos desarrollando algo más inteligente que nosotros mismos, y no hay muchos ejemplos en la historia donde lo menos inteligente controle a lo más inteligente», reflexiona.

Para ilustrar su preocupación, utiliza una metáfora poderosa: «La evolución diseñó al bebé para controlar a la madre, pero ese es el único caso que conozco». Y aunque puede sonar casi poético, Hinton no oculta su alarma. «Es aterrador imaginar un mundo en el que estas máquinas sean más inteligentes que nosotros. Y muchos expertos creen que esto ocurrirá en los próximos 20 años».

La cuestión no es solo técnica, sino profundamente social. El profesor señala que una IA mal gestionada podría agravar las desigualdades, dejando a millones sin empleo mientras los beneficios se concentran en unos pocos. «Si creamos una brecha masiva entre ricos y pobres, será catastrófico para la sociedad», advierte.

Además, Hinton recuerda los paralelismos con la revolución industrial. En aquel entonces, las máquinas reemplazaron la fuerza física humana, pero las personas seguían teniendo el control gracias a su inteligencia. «Ahora, estamos sustituyendo nuestra inteligencia, lo que plantea una amenaza completamente diferente», sentencia.

Aunque el potencial de la IA es innegable, con aplicaciones revolucionarias en sectores como la salud y la industria, Hinton subraya que esta tecnología requiere regulación urgente. «Necesitamos sistemas políticos capaces de gestionar esta amenaza. Sin ellos, el riesgo de un uso indebido es enorme».

El mensaje es claro: la inteligencia artificial podría cambiar el mundo para mejor, pero solo si nos adelantamos a sus riesgos. Sin regulación ni reflexión, podríamos estar cediendo el control a algo que aún no entendemos por completo. «Estas máquinas tienen el poder de transformar nuestras vidas. La pregunta es si seremos capaces de guiarlas o si ellas nos guiarán a nosotros», concluye Hinton.